Iban caminando por un escarpado sendero, cuando de improviso, desde atrás de unos enormes peñascos, botando espumarajos, con los ojos desorbitados, el pelo desgreñado, la ropa hecha jirones y dando grandes alaridos apareció el loco:
-"¡Hermanos, hermanos, ayúdenme... me desarmo, los miembros se me separan y no puedo evitarlo; hay veces en que mi pie derecho desea ir a la izquierda y no me es posible detenerlo, o mi ojo derecho mira hacia adentro y el izquierdo hacia afuera... ha desaparecido mi mandíbula... mis vísceras se desparraman en el espacio... el aire entra en ellas... hagan algo por favor... temo morir destazado y desbaratado igual que un cordero...!
Mis sueños me consumen y ya no sé qué es verdad y qué es un sueño... el día y la noche me son iguales; lo que en ellos veo son imágenes y visiones, abismos profundos y colores, la fundación del Universo y sus pilares, las llamas oscuras del fondo de la Tierra y sus dioses... estrellas colapsadas y sonidos con sabor a mar y plantas oceánicas...
Hay uno que me atormenta y no se cómo detenerlo... siento que el aire me quema los pulmones, veo los cielos cubiertos de pestilencia y muerte, el Sol ya no alumbra bajo densos nubarrones; hay ciudades grises y oscuras, hombres muertos que caminan cabizbajos y dormidos...
Calles con letreros que pestañean mil luces y colores, un ruido ensordecedor destroza mis oídos y alaridos de hombres que suplican...el sueño se deshace en una suave niebla...
Aparece un monstruo gigantesco, se apodera de las aguas y de la tierra, consume los árboles y la sangre del planeta, todo lo invade con sus tentáculos, incluso los mares... vigila los cielos con estrellas de metal...
Devora y se alimenta de niños y de hombres... las madres le entregan a sus hijos... Veo a los hombres destrozarse los unos a los otros, se matan como animales, su sangre riega la tierra, mientras sus entrañas son desparramadas en los campos y los buitres las comen; a toda esta aberración la llaman gloria y aún se enorgullecen de ella; los hombres están numerados, llevan su marca en la frente...
El monstruo los controla en sus hogares y en sí mismos; se alimenta de su sangre y de sus vidas, luchan, viven y mueren por servirlo... Satanás es su nombre, el que habita en lo oscuro de la Tierra, el que castra a los hombres y a las hembras; les destruye desde su interior y desde su afuera, los inhibe y los tortura... a través de sus mentes atrofiadas los domina y los vigila, aun los pocos que escapan a su dominio terminan por adorarlo..."
De pronto , el loco quedó paralizado, se tambaleó cayendo cuan largo era y mirando fijamente al cielo dijo con voz profunda y diferente:
-"¡Ah, criatura infame, demonio abyecto!, ¿qué has hecho de este mundo, hasta cuándo lo atormentas? Desde lo profundo del Universo, las Huestes Celestiales, los Señores de la Vida te ordenan que abandones este planeta, ve a lo profundo del Cosmos, ve a lo oscuro de lo oscuro, para que seas Luz nuevamente, estas encadenado, tu imperio terminó, muere maldito entre los malditos...
La Luz se posesiona otra vez de la Tierra... deja a esta pobre raza dormida, permite que despierten, atrás víbora de mil cabezas, tu fin y tu muerte ya está decretada... ¡¡¡muere... muere...!!!"
Dicho esto, el loco cerró los ojos y dando un gran suspiro cayó desmayado; pasaron algunos minutos y de improviso se incorporó mirando asustado hacia todos lados y dijo:
-"Dime amigo caminante, tú que hablas con los animales y eres amigo de las nubes y del viento, dime que esto es sólo un mal sueño, dímelo, por favor te lo imploro..."
-"Es nada más que un mal sueño, sólo un sueño, tranquilízate y siéntate".- le dijo cariñosamente el hombre.
-"Yo sabía que era una pesadilla".- dijo el loco -"Sólo que lo olvido, los sueños invaden mi mente y no puedo saber qué es verdad o qué es mentira... Cuando yo vivía entre los hombres, antes de vivir ensoñando, ese si que era mundo y no el horror en que habito hoy en día...
Entre los hombres aquellos había armonía y se amaban los unos a los otros; una mujer y un hombre se miraban a los ojos porque no había temor entre ellos; los hijos respetaban a sus padres y éstos a sus hijos; el Cielo y el Mar se unían en el horizonte y el cordero moraba junto al lobo, el Hombre y la Tierra eran uno, como un hijo y su madre... ¿Cómo recupero la cordura, cómo salgo de mi pesadilla?... ya no deseo vivir con este horror en mí..."
Luego, cayeron lágrimas por su rostro curtido y desencajado, lágrimas de sufrimiento verdadero; quizá el mundo entero sobrevivía gracias a los frutos de un pobre enajenado, pagaba por el resto de los hombres... gobernaba sin saberlo... por medio del Sol... y el amarillo... tal vez al mundo entero...
-"¡Hermanos, hermanos, ayúdenme... me desarmo, los miembros se me separan y no puedo evitarlo; hay veces en que mi pie derecho desea ir a la izquierda y no me es posible detenerlo, o mi ojo derecho mira hacia adentro y el izquierdo hacia afuera... ha desaparecido mi mandíbula... mis vísceras se desparraman en el espacio... el aire entra en ellas... hagan algo por favor... temo morir destazado y desbaratado igual que un cordero...!
Mis sueños me consumen y ya no sé qué es verdad y qué es un sueño... el día y la noche me son iguales; lo que en ellos veo son imágenes y visiones, abismos profundos y colores, la fundación del Universo y sus pilares, las llamas oscuras del fondo de la Tierra y sus dioses... estrellas colapsadas y sonidos con sabor a mar y plantas oceánicas...
Hay uno que me atormenta y no se cómo detenerlo... siento que el aire me quema los pulmones, veo los cielos cubiertos de pestilencia y muerte, el Sol ya no alumbra bajo densos nubarrones; hay ciudades grises y oscuras, hombres muertos que caminan cabizbajos y dormidos...
Calles con letreros que pestañean mil luces y colores, un ruido ensordecedor destroza mis oídos y alaridos de hombres que suplican...el sueño se deshace en una suave niebla...
Aparece un monstruo gigantesco, se apodera de las aguas y de la tierra, consume los árboles y la sangre del planeta, todo lo invade con sus tentáculos, incluso los mares... vigila los cielos con estrellas de metal...
Devora y se alimenta de niños y de hombres... las madres le entregan a sus hijos... Veo a los hombres destrozarse los unos a los otros, se matan como animales, su sangre riega la tierra, mientras sus entrañas son desparramadas en los campos y los buitres las comen; a toda esta aberración la llaman gloria y aún se enorgullecen de ella; los hombres están numerados, llevan su marca en la frente...
El monstruo los controla en sus hogares y en sí mismos; se alimenta de su sangre y de sus vidas, luchan, viven y mueren por servirlo... Satanás es su nombre, el que habita en lo oscuro de la Tierra, el que castra a los hombres y a las hembras; les destruye desde su interior y desde su afuera, los inhibe y los tortura... a través de sus mentes atrofiadas los domina y los vigila, aun los pocos que escapan a su dominio terminan por adorarlo..."
De pronto , el loco quedó paralizado, se tambaleó cayendo cuan largo era y mirando fijamente al cielo dijo con voz profunda y diferente:
-"¡Ah, criatura infame, demonio abyecto!, ¿qué has hecho de este mundo, hasta cuándo lo atormentas? Desde lo profundo del Universo, las Huestes Celestiales, los Señores de la Vida te ordenan que abandones este planeta, ve a lo profundo del Cosmos, ve a lo oscuro de lo oscuro, para que seas Luz nuevamente, estas encadenado, tu imperio terminó, muere maldito entre los malditos...
La Luz se posesiona otra vez de la Tierra... deja a esta pobre raza dormida, permite que despierten, atrás víbora de mil cabezas, tu fin y tu muerte ya está decretada... ¡¡¡muere... muere...!!!"
Dicho esto, el loco cerró los ojos y dando un gran suspiro cayó desmayado; pasaron algunos minutos y de improviso se incorporó mirando asustado hacia todos lados y dijo:
-"Dime amigo caminante, tú que hablas con los animales y eres amigo de las nubes y del viento, dime que esto es sólo un mal sueño, dímelo, por favor te lo imploro..."
-"Es nada más que un mal sueño, sólo un sueño, tranquilízate y siéntate".- le dijo cariñosamente el hombre.
-"Yo sabía que era una pesadilla".- dijo el loco -"Sólo que lo olvido, los sueños invaden mi mente y no puedo saber qué es verdad o qué es mentira... Cuando yo vivía entre los hombres, antes de vivir ensoñando, ese si que era mundo y no el horror en que habito hoy en día...
Entre los hombres aquellos había armonía y se amaban los unos a los otros; una mujer y un hombre se miraban a los ojos porque no había temor entre ellos; los hijos respetaban a sus padres y éstos a sus hijos; el Cielo y el Mar se unían en el horizonte y el cordero moraba junto al lobo, el Hombre y la Tierra eran uno, como un hijo y su madre... ¿Cómo recupero la cordura, cómo salgo de mi pesadilla?... ya no deseo vivir con este horror en mí..."
Luego, cayeron lágrimas por su rostro curtido y desencajado, lágrimas de sufrimiento verdadero; quizá el mundo entero sobrevivía gracias a los frutos de un pobre enajenado, pagaba por el resto de los hombres... gobernaba sin saberlo... por medio del Sol... y el amarillo... tal vez al mundo entero...
